El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, evitó ahondar en detalles respecto de la nueva audiencia que mantendrán hoy representantes del Gobierno en Nueva York, convocada por el juez Thomas Griesa, aunque reiteró sus críticas sobre la mirada sesgada del magistrado.

"No podemos tener perspectivas favorables; el juez siempre fue parcial", señaló ante la pregunta de uno de los periodistas en su habitual conferencia de prensa matutina.

El encuentro de hoy será el cuarto en el lapso de un mes, pero el más importante desde que la Corte Suprema de los Estados Unidos decidiera mantenerse al margen de la pelea entre la Argentina y los llamados fondos buitre, NMKL y Aurelius, que obtuvieron un fallo favorable de Griesa para cobrar unos US$ 1500 millones por bonos impagos desde 2001.

La cita, convocada ayer por el magistrado, está prevista para las 11 (12 hora argentina). Se estima que Griesa ingresará a su tribunal, repleto de abogados, analistas, inversores y periodistas, y subirá a su estrado para volver a hablar de la Argentina. El tema principal será el "reciente default" del país, un evento del que el Gobierno lo culpó y que las negociaciones continuas que ordenó no lograron impedir.

Se sabe que hoy el juez debe decidir el destino de los pagos de la deuda que procesan las casas de "clearing" europeas, Eurclear y Clearstream, y el banco de inversión JP Morgan y, además, el pedido de un grupo de bonistas europeos, Euro Bondholders, para que dicte una medida cautelar y ponga en suspenso su fallo, y ponga punto final al default y descomprima las negociaciones entre la Argentina y los holdouts.

Por otro lado, es probable, que Griesa dedique un espacio de la audiencia a las declaraciones vertidas por la Casa Rosada, sobre todo, tras los cuestionamientos de los que fue objeto por parte del gobierno nacional y también de la prensa.