Fija te con qué facilidad nos sentimos agraviados o ofendidos por otras personas. La sorprenderte revelación que hoy venimos a darte en la voz de la noche es que un poco de atención a este respecto puede cambiar absolutamente tuya. Nadie te ofende ni te ha ofendido, son nuestras expectativas de lo que esperábamos de esas personas las que nos hieren y las expectativas las crean nuestros pensamientos no sean reales o sean imaginarias.

Si por ejemplo; esperabas que tus padres te dieran más amor y no te lo dieron no tienes que porque sentirte ofendido son tus expectativas de lo que un padre ideal debió hacer contigo estas fueron violadas y tu idea fue la que te lastimó. Sí que es cierto que el papel de los padres es amar a sus hijos, pero fíjate que ningún hijo se siente del todo amado.

Si esperabas que tu pareja reaccionara o reaccione de tal o cual forma y no lo hace, tu pareja no te ha hecho nada es la diferencia entre las atenciones que esperabas la que tú creías que debieran tener los otros contigo las que realmente tuvieron las que te hieren. Nuevamente tenemos que decir que son nuestras imaginaciones.

Enojada con Dios son tus creencias de lo que debería hacer Dios las que te lastimaron, Dios jamás ofende ni daña a nadie. Un habito requiere de todas sus partes para funcionar si pierde alguna el habito se desmorona. El habito de sentirnos ofendido por lo que nos hacen los demás, repito que en realidad nadie nos lo hace y que nos produce mucho sufrimiento podría desaparece cuando reconozcamos mejor la fuente de las ofensas, cuando nacemos somos auténticos pero nuestra verdadera naturaleza es suprimida y sustituida artificialmente por conceptos de nuestros padres, la sociedad, lo que la TV nos enseña, crean una novela falsa de cómo debería hacer las cosas en todos los aspectos de nuestra vida y cómo deberíamos actuar respecto a los demás. Una novela no tiene nada que ver con la realidad también las personas somos criaturas inventadas.

A lo largo de la vida coleccionamos (y dime si no es así) padres, amigos, pareja, compañeros de trabajo, jefes, y las almacenamos en nuestro interior. Las experiencias negativas dejan una huella en nosotros superior a las positivas ¡lamentablemente! Y cuando una persona es maltratada por alguien deja su experiencia registrada en su inventario (vamos a llamarlo así) cuando conoce a alguien tiene miedo y trata de ver si la nueva personas tendrá las mismas actitudes que la que le hirió, saca una experiencia de su inventario negativo, se pone las lentes de esa experiencia y ve a las nuevas personas con la experiencia de su vida con esas lentes, el resultado; se duplica los problemas y las mismas experiencias negativas. Un poco es Explicar de manera diferente lo que es una grabación de manera que el inventario negativo sigue creciendo, en realidad lo que hace es que te estorba no te deja ser feliz y a medida que avanza en años esta experiencia nos hace más infelices por que va agrandándose el dolor aumenta año a año nuestro inventario, nuestra despensa de experiencias negativas.

Vamos a fijarnos ahora o mejor trae a tu recuerdo si conoces a alguna persona mayor o de edad avanzada, o el típico matrimonio de muchos años. Su inventario que parece que es toda de negatividad (bajo la teoría que estoy contando hoy) una y otra vez sacan experiencias negativas ante cualquier circunstancia. Una de las mayores fuentes de ofensa es la de tratar imponer tu punto de visa a una persona para guiar su vida o sea tratar de que tú hagas lo que yo creo que es lo correcto que hagas porque es mejor para ti, como decía Blay “ liberarte de mi necesidad de ayudarte”.