El secretario general de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, el único que no quiso subirse al palco de la marcha de las centrales sindicales del último viernes, aseguró por Continental que lo hizo porque "El acto se fue desvirtuando. En principio se habló de elaborar un documento común y que hubiera la menor cantidad de oradores posibles", argumentó en El Último de la Fila.