El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, consideró que, si bien el balotaje de ayer definió “un ganador”, la diferencia entre el presidente electo, Mauricio Macri, y el candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, resultó “nimia” y constituye “evidentemente un empate. Siempre vamos a estar al pie del cañón, defendiendo los derechos de los otros y preparándonos para volver a gobernar”, aseveró en su habitual diálogo con la prensa en Casa de Gobierno. 

Allí, destacó que, el hecho de que, sobre 25.101.000 votos válidos emitidos en la segunda vuelta electoral celebrada ayer, “la diferencia haya sido de 700 mil votos” en favor del candidado de Cambiemos, “evidentemente es un empate. No hay forma que se pueda negar que sea un empate si, en 25,1 millones de votos, hay 700 mil de diferencia”, sostuvo Aníbal Fernández, quien, no obstante, frente a las preguntas de los periodistas, afirmó que no iba a “agraviar” a nadie y que la elección tenía un “ganador”, en referencia al presidente electo, Mauricio Macri. 

Por otro lado, Fernández remarcó que ésta será “la primera vez en la historia que un gobierno entrega a otro un país distinto, un país sin conflictos. Salimos prácticamente empatados”, insistió el ministro coordinador, quien evaluó que “no es una diferencia que nos diga a nosotros que estábamos tan equivocados”. De hecho, puso el acento en el respaldo también cosechado en las urnas por el Frente para la Victoria con el argumento de que la candidatura de Daniel Scioli consiguió el respaldo de “casi el 50 por ciento de la sociedad después de haber gobernado doce años”. 

En la segunda vuelta electoral celebrada ayer, con el 99,17 por ciento de los votos escrutados, el candidato del frente opositor Cambiemos resultó electo presidente con el 51,40 por ciento de los votos, mientras que el oficialismo, representado por Daniel Scioli, obtuvo el 48,60 por ciento de los sufragios. “¿Sabe que hubiese pasado si hubiese sido al revés, si con una diferencia de 700 mil votos hubiésemos ganado nosotros? Estarían los tanques en la puerta, los aviones dando vueltas y las denuncias hasta a la dirección electoral intergaláctica”, ironizó Aníbal Fernández en su diálogo con la prensa.