El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, consideró “un despropósito” el anuncio de Gran Bretaña referido a un refuerzo del despliegue militar en las Islas Malvinas frente a un hipotético ataque argentino. “Como van a tener elecciones, recurren a un nacionalismo berreta de poner en vilo a toda la sociedad británica sobre un hecho militar”, consideró al ser consultado sobre el anuncio del ministro de Defensa británico, Michael Fallon.
 
Asimismo, Fernández remarcó que las políticas de derechos humanos impulsadas en Argentina desde 2003 “vinieron para quedarse”. Así, afirmó que “no hay que preocuparse” por la posibilidad de que un gobierno no kirchnerista retroceda en la política de derechos humanos implementada en los últimos 12 años.  “Hoy nos reconoce y nos respeta el mundo entero. Es para quedarse tranquilo. Estoy convencido de que el Frente para la Victoria será Gobierno y que las políticas de derechos humanos vinieron para quedarse”, se explayó.
 
Finalmente, Fernández volvió a defender la designación del general César Milani como jefe del Ejército, argumentando que “no había ningún elemento para que no se le otorgara el acuerdo” a su nombramiento en el Senado, dado que “no está procesado en ninguna causa. Siendo senador y miembro de la Comisión de Acuerdos defendí la postulación de Milani. Cuando venían acuerdos controvertidos me los llevaba a mi casa para examinarlos y, en este caso, el expediente que ingresó al Senado no me decía nada implicara una complicación de su situación”, puntualizó Fernández.
 
“Llegado el caso de que su situación procesal se complicara, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner “le pediría el retiro”, del mismo modo que lo hizo en el caso de Roberto Bendini y Jorge Godoy, enfatizó.