“No conozco la denuncia de Bonasso pero no tengo dudas de que se trata de la puntada final de un plan que inició Cristina hace un año y consiste en ir pasando el control de la inteligencia del Estado al poder militar”, enfatizó Alberto Fernández, ex jefe de gabinete, al opinar sobre los cambios en el gabinete y en la SIDE promovidos por el gobierno.
 
“Le garantiza a Milani el control de la inteligencia. Es una ironía…”, subrayó en Bravo.Continental.
 
“Si hubiera querido corregir la inteligencia, no hubiera puesta al frente a Oscar Parrilli, quien se dedicó hasta ahora a cargar de nafta los autos y los aviones del gobierno”, remarcó.
 
El regreso de Aníbal Fernández, dijo, “es la necesidad del gobierno de tener un peleador que defienda sus problemas.  (Jorge) Capitanich es un hombre que explica con vocación casi académica los problemas que el gobierno enfrenta pero lo que se necesita es mayor vehemencia”.