La fiscalía de Paraguay ordenó ¡ la captura de un intendente de la zona donde el jueves pasado fue asesinado el periodista Pablo Medina e imputó a un hermano del funcionario, también prófugo, como presunto autor del hecho. Se trata del intendente de Ypehú, Vilmar Acosta, quien desapareció de esa localidad apenas se conoció el crimen y es sospechado de haber instigado el asesinato, y de su hermano Wilson, quien fue imputado de homicidio doloso.

Medina -corresponsal del diario ABC Color que estaba amenazado por sus investigaciones sobre el narcotráfico- y una mujer que lo acompañaba, Antonia Almada, fueron asesinados a balazos en Villa Ygatimí. Tanto Villa Ygatimí como Ypehú forman parte del departamento Canindeyú, en el noreste del país y al que también pertenece Curuguaty, el distrito donde en junio de 2012 un enfrentamiento entre campesinos y policías dejó 17 muertos y derivó en la destitución del presidente Fernando Lugo.

Los fiscales Sandra Quiñónez, Néstor Cañete, Cristian Roig y Lorenzo Lezcano, a cargo del caso, pidieron además la prisión preventiva de Wilson Acosta, quien fue "reconocido plenamente" como uno de los supuestos autores materiales de los asesinatos, informó la prensa local. Asimismo, realizaron allanamientos en la casa y una quinta de Vilmar Acosta y en la sede de la intendencia de Ypehú, donde se incautaron de armas, chalecos antibalas y vehículos con patente brasileña, entre otros elementos.

Por el caso ya están detenidas otras cuatro personas, tres de las cuales fueron imputadas de homicidio doloso. Mientras tanto, cronistas que cubren el caso en Canindeyú denunciaron que son víctimas de "constantes amenazas" y "hostigamientos brutales", y otros colegas realizaron una manifestación de protesta frente a la sede de ABC Color, en Asunción, en reclamo del esclarecimiento del hecho, y anunciaron que mañana serán recibidos por el ministro del Interior, Francisco de Vargas.

Medina fue el tercer periodista asesinado en Paraguay en lo que va del año.