En Japón, se produjo otra fuerte réplica de 6,6 grados en la escala de Richter y afectó la costa oriental de la isla principal, Okinawa.

En tanto, en la central nuclear de Fukushima instalaron cables para llevar electricidad a los seis reactores y realizan esfuerzos para reparar los sistemas de frío.

La contaminación durará “décadas”, afirmó la autoridad de seguridad nuclear francesa.

Sostuvo que las fugas radiactivas de la central nuclear de Fukushima “son importantes y continúan”.

El organismo advirtió que, teniendo en cuenta la meteorología, es probable que la contaminación “haya llegado hasta un centenar de kilómetros”.

El Gobierno japonés prohibió hace ya días la venta de leche y de dos tipos de verduras producidos en las cuatro prefecturas próximas a la central de Fukushima, debido a un alto nivel de radiactividad.

En Tokio hay escasez de leche, apagones y menor actividad comercial.

El número de fallecidos por el terremoto y el tsunami ya supera los nueve mil hay más de doce mil seiscientos desaparecidos.

La bolsa de Tokio se recuperó este martes y subió más del 4 por ciento.

Por Continental, Nicolás Castellanos, enviado especial de Prisa Radio, describió que en la capital nipona llevan “un día de sacudidas. Estos terremotos tienen una duración bastante larga”.

En Magdalena Tempranísimo, reseñó que “el reactor 3 sigue lanzando humo”.

“Son nueve provincias japonesas donde han detectado radiación en aire o agua”, precisó.