Grecia: los supermercados podrán vender alimentos vencidos
La medida, que no incluye carne ni leche, busca frenar la inflación. La crisis es tal que en Salónica, la segunda ciudad del país, se fundió hasta el último local de McDonald's.
Los supermercados de Grecia podrán vender a partir de hoy alimentos vencidos, una medida controvertida que, si bien estará en vigor por un período limitado, apunta a la baja de precios. Se trata de otra decisión anti-crisis que, como ya ocurrió en varias ocasiones, generó inmediatamente protestas de las asociaciones, en este caso de los consumidores que hablan de "una ofensa a la dignidad del pueblo griego".
La medida, aprobada por el ministerio para el Desarrollo Económico, "convertirá a Grecia en un gigantesco basural, dividiendo a los consumidores en dos categorías, los de Primera A y los de Primera B". El ministerio acusó a su vez a los medios de prensa de difundir "falsas informaciones", insistiendo en el hecho que la medida no implica "grandes cambios", ya que se trata en realidad de alimentos que se conservan incluso más allá de la fecha de vencimiento, por ejemplo: pastas, arroz, aceite.
En cambio, los productos como la carne y la leche no están incluidos en la decisión, de la que se venía hablando en Atenas desde hace ya un año, pero que -precisamente a raíz de las polémicas- hasta ahora no había entrado en vigor. La decisión del ministerio coincide con un momento de reflote del "orgullo griego" en la cocina y las costumbres alimentarias. Con la crisis, volvió la moda de la cocina local, mientras que perdieron terreno las grandes cadenas de "fast food" estadounidenses.
La precariedad de la situación económica levantó por ejemplo el consumo de los "souvlaki", tradicional carne asada helénica, que desplazó los "hamburger" norteamericanos, hecho que provocó incluso el cierre del último McDonald's en actividad en Salónica. Las confecciones y frascos de los alimentos con fecha vencida deberán ser colocadas en estanterías separadas y al mismo tiempo, los propietarios de los supermercados deberán asumir todas las responsabilidades por las ventas.
La medida no prevé, en cambio, que los productos vencidos sean vendidos en bares y restaurantes. Paradójicamente, la nueva norma está plenamente en sintonía con los reglamentos de la Unión Europea, que permiten vender los alimentos industrializados hasta una semana después del día de vencimiento.
Mientras que los productos que llevan señalados el mes, pueden ser vendidos incluso un mes después y aquellos marcados con el año hasta tres meses más tarde.