Un avión de línea que venía de Riad con más de 170 pasajeros a bordocayó bajo una lluvia de tiros mientras aterrizaba en la ciudad paquistaní de Peshawar: una pasajera murió y dos miembros de la tripulación sufrieron heridas por los disparos.

Nadie se atribuyó el ataque en esta región paquistaní sumergida en plena ofensiva del ejército contra los talibán, quienes, a su vez, ya habían advertido a las aerolíneas que dejaran de volar.

El aparato de Pakistán International Airlines (PIA) se acercaba al aeropuerto cuando fue alcanzado por cuatro o cinco balazos, según Mashud Tajwar, portavoz de la compañía aérea.

"Los disparos fueron efectuados desde el exterior del aeropuerto, una pasajera y dos tripulantes resultaron heridos, la pasajera murió en el hospital", explicó.

El autor o autores de los disparos abrieron fuego contra el avión cuando volaba a 1.500 metros de altitud, según otro alto responsable de la policía, Najeeb Ur Rehman, convencido de que estuvo a punto de producirse una catástrofe.

Un miembro de la tripulación se encontraba en estado grave, según Muhammad Faisal, un responsable policial.

El atentado no fue reivindicado, al menos públicamente, pero la semana pasada los talibán advirtieron a las empresas internacionales y compañías aéreas, y les aconsejaron que cesaran sus actividades o se atuvieran a las consecuencias.