Autoridades de Corea del Sur allanaron una secta en el marco de la búsqueda del presidente de la empresa dueña del ferry Sewol, desaparecido desde el naufragio del 16 de abril en el que murieron más de 300 personas. El hombre, de 73 años, está acusado de malversación de fondos, evasión y soborno por transacciones ilegales entre la naviera Cheonghaejin Marine y empresas afiliadas que se destaparon después del naufragio.

Los investigadores también analizan su presunta responsabilidad en el accidente, tras conocerse que el buque llevaba hasta el triple de la carga permitida y carecía de aguas de lastre, que se utilizan para garantizar la estabilidad del casco. Yoo Byung-eun no posee acciones de Cheonghaejin Marine pero se cree que controla de facto la empresa a través de sus hijos, que sí tienen un importante número de participaciones, informó la agencia Efe.

Tanto el empresario como sus tres hijos están siendo buscados por la policía surcoreana al no haberse presentado a las citaciones de los fiscales. La nave, que cubrí­a la ruta desde Incheon a la isla de Jeju, se hundió tras volcar con 476 personas a bordo, entre ellas 325 estudiantes de 16 y 17 años que realizaban un viaje escolar.