Normalmente, los finales de temporada de las series y realities deparan un momento de éxtasis a modo de corolario. Y Lindsay Lohan no quiso que su programa sea la excepción, por eso se "guardó" para el último episodio de Lindsay una dolorosa confesión: la pérdida de un embarazo que no llegó a ser público pero que sí llegó a ilusionarla mucho.

Según contó ella misma frente a cámaras, el aborto espontáneo se produjo unos días antes de comenzar a grabar el programa, y eso fue lo que demoró la grilla de trabajo. "Nadie sabía de esto, pero sufrí la pérdida de un embarazo", aseguró la actriz de 27 años entre lágrimas.

Lohan contó que lo primero que hizo el equipo de emergencias médicas fue inmovilizarla. "No me podía mover, me sentí horriblemente mal. Mentalmente, una situación así te destroza", aseguró. La ex chica Disney se negó a dar detalles de quién era el padre o el tiempo de embarazo que llevaba al momento de sufrir el aborto.

La confesión se produjo apenas un día después de que, durante una entrevista, Lindsay confesara que la lista de 36 amantes que circuló hace unos días era real, y que confeccionarla había sido parte del tratamiento que llevó adelante por su adicción al alcohol. "Ese fue, de hecho, mi quinto paso en la clínica Betty Ford", explicó. "Alguien, mientras grababa mi reality, debe haber tomado una fotografía de la lista. Es algo muy personal y es realmente muy desafortunado que se haya hecho pública".

Pero eso no es todo: en otra nota que la actriz le concedió a la revista KODE Magazine, aseguró que por estos días está de novia con un hombre casado. "Este muchacho que estoy viendo me envió una vez un jet porque quería verme... Porque él está casado y tiene hijos", apuntó. Según el periodista que la entrevistó, la actriz bebió un vaso de vodka mientras conversaba con él, despejando cualquier duda sobre si ha conseguido mantenerse sobria desde su última internación.