Pasadas las 22:30 y tras una cuenta regresiva de 10 minutos, Justin Bieber salió a escena en medio de gritos eufóricos de las más de 50.000 fans que fueron al estadio de River Plate a disfrutar del show del mayor ídolo teen del momento.

Colmado de adolescentes vestidas de violeta (el color preferido de Justin y el que lo caracteriza), las Believers (nombre que tienen sus fanáticas) acompañaron al canadiense en cada uno de sus temas y gritaron con cada uno de sus movimientos.

"All Around The World" fue el que dio inicio al show, con el artista de 19 años vestido todo de blanco y acompañado por su banda y un grupo de baile integrado por 12 personas.

A diferencia del show anterior que dio en la Argentina en 2011, el Believe Tour (inspirado en su más reciente disco "Believe"), mostró a un Justin más adulto,con sonidos más maduros, pero con el talento intacto de siempre.