Por Martín Leopoldo Díaz

 

Creada en 1847 y actualmente bajo la batuta del Maestro José Pons, la Orquesta Sinfónia del Gran Teatro del Liceo de Barcelona se ha convertido en la primera Orquesta Sinfónica del Estado Español,  desarrollando el  ciclo de conciertos "El Liceo en el Palau"  en el emblemático Palau de la Música Catalana de la ciudad Condal .

 

El concierto del domingo 12 de enero se denominó "Odisea en el Palau" y contó con la presencia de la extraordinaria  violonchelista argentina Sol Gabetta.

 

El espectáculo comenzó con el "Intermezzo de la Suite Intertonal" de Jaime Pahissa,compositor catalán que residió en Argentina desde el año 1937 hasta su fallecimiento en 1969. El Intermezzo es un  fragmento breve de gran belleza melódica y armónica, exquisitamente orquestado por el autor catalán e interpretado   a la perfección  por la Orquesta del Teatro del Liceo.

 

Si hay un concierto para violonchelo y orquesta realmente popular es el de Antonín Dvorak (si menor Op 104) .En él  la nostalgia y añoranza por la patria siempre están presentes.Dvorak hace alusión a las melodías, armonías y ritmos folklóricos bohemios.

 

Sol Gabetta fue una excepcional y exquisita  intérprete del concierto. Tocó con alma y vida, con todo su cuerpo, logrando  cautivar  al exigente público barcelonés. Delicada y dúctil, dueña de un refinado sonido, con pianísimos y fortísimos estremecedores,  Sol Gabetta sedujo  al público por la plenitud y pasión de su interpretación, con enorme carisma y poder de comunicación. Su bis fue asombroso: el fascinante  "Canto de los pájaros", obra catalana de origen popular y asociada al  renombrado  violoncellista catalán Pau Casals.

 

El programa finalizó con el poema sinfónico "Así hablaba Zarathustra Op 30" de Richard Strauss,  inspirada en la obra de Nietzche. Obra colmada de imágenesy belleza, fue interpretada  magníficamente por la Orquesta Sinfónica del Teatro del Liceo, no solamente en los difíciles momentos contrapuntísticos, también en los de brillantez y espectacular orquestación.

 

Un concierto estupendo que pudo presenciar sin pasusa, con una solista extraordinaria, de aquellos difíciles de olvidar.