River logró un empate 1 a 1 ante Atlético Nacional en Colombia que lo deja muy bien parado de cara al partido de vuelta de la final de la Copa Sudamericana . El miércoles próximo jugará el desquite en el Monumental y, con ganar, será campeón. No hay gol de visitante, por lo cual cualquier igualdad lleva la definición a los penales.

Como hace seis días en el Monumental, los dueños de todos los flashes fueron Marcelo Barovero y Leonardo Pisculichi. El primero, porque resultó otra vez clave, sobre todo en los primeros minutos del encuentro. El otro, porque anotó el 1 a 1 en el momento justo con un golazo desde afuera del área.

Fue un partido complicadísimo para el conjunto millonario, que logró soportar los lógicos embates del local en los primeros minutos, gracias a un par de intervenciones claves de Trapito y la ayuda del palo. Con el correr de los minutos, el equipo de Núñez fue equilibrando las acciones. Justo entonces, llegó el gol de Nacional. A los 34´, una gran asistencia de Carmona le permitió a Berrío ingresar al área solo por la derecha, y con un remate cruzado venció a Barovero. El conjunto dirigido por Marcelo Gallardo acusó recibo y le costó reaccionar. Sin embargo, supo sostener ese resultado hasta el entretiempo.

En el descanso, el entrenador aprovechó para reacomodar las piezas y en la segunda etapa se vio otro River, mucho más agresivo y decidido. De todos modos, en ese rol el equipo dejó espacios para la contra de los locales, que llegaron en al menos dos ocasiones. La falta de puntería y un nuevo guiño de suerte (esta vez, del travesaño) mantuvo intacto el 1 a 0. El Millo fue y fue, pero dio ventajas. Berrío se perdió el 2-0 casi abajo del arco. Y en la siguiente, otra vez Piscu, como contra Boca, sacó un bombazo desde afuera del área a los 20´ para clavar un 1 a 1 que se gritó como si fuera el gol de la victoria.

Los últimos 25 minutos fueron de ida y vuelta. Los dos equipos apostaron a ganar y entonces las emociones se sucedieron en ambos arcos. Un cabezazo de Funes Mori se fue apenas desviado, otro remate de Cardona se fue por arriba y un remate de Teo Gutiérrez pegó en un defensor y se fue lejos. Sobre la hora, Cavenaghi tuvo la chance del 2 a 1, pero la desaprovechó. Pese a las intenciones, el resultado no cambió. El 1 a 1 deja todo abierto, aunque River siente que dio un paso grande rumbo a la ilusión de ganar su primera Copa Sudamericana, y su primer título internacional desde la lejana Supercopa del 97´.