El presidente de Argentinos Juniors, Luis Segura, se mostró “más aliviado que contento” por la salvación del descenso en la última fecha, a expensas de San Martín de San Juan y luego de que se dijera hace pocas semanas que había vendido la pérdida de categoría del club de La Paternal para salvar a Independiente, a la postre, el segundo descendido de esta temporada a la B Nacional.

En La Mañana, admitió que “aún” tiene “fuerzas para seguir, pero cada vez menos ganas. Acá se dijeron muchísimas cosas graves, pero siempre pasa lo mismo: la realidad siempre termina echando por tierra todo lo que se dice antes de que termine un torneo. Los equipos se salvan y se van al descenso dentro de la cancha”, se ufanó.

“La verdad, estoy más aliviado que contento por habernos salvado. Es un drama, te la pasás haciendo cuentas, ves tres partidos en uno mientras juega tu equipo... Y es un desahogo porque no son buenos tiempos para ser dirigente deportivo en este país. Hoy, si hay un tipo maltratado es el directivo de fútbol. Hay buenos y malos como en todos lados, pero la mayoría no merecemos sufrir el destrato, la falta de respeto. El dirigente parece que es evasor de impuestos, maneja dinero mal habido, cobra en los pases de los jugadores”, se victimizó Segura.

El dirigente de los Bichos Colorados elogió la tarea de Ricardo Caruso Lombardi y aclaró que va a seguir en el club. Sin embargo, subrayó que “el mérito es de todos, o es de cualquiera, no importa. Digo lo mismo que dije cuando Argentinos salió campeón: es un triunfo del club. Después, Luis Segura es un hombre que está de paso, como todos”.