En una fiesta inaugural que promete ser corta pero colorida y sorprendente, Brasil empezará a tener su segundo Mundial y a intentar saldar una vieja deuda que siente desde el Maracanazo de 1950.

Para ello cuenta hoy con el joven Neymar, el astro con el que el hincha quiere llegar al hexacampeonato: "Vamos a realizar el sueño de todos", prometió junto al técnico Luiz Felipe Scolari en la tarde de ayer.

Mil millones de personas se estima que serán los televidentes de la ceremonia inaugural que iniciará a las 16 para luego dejar en manos del seleccionado local y Croacia el comienzo de la competencia en Arena Corinthians.

Ante los temores de más protestas, la presidenta Dilma Rouseff advirtió hoy en Salvador, Bahía, que no habrá la "menor contemplación" con los que cometan vandalismo.

LA FIESTA

El fútbol y las raíces brasileñas estarán "como un significado vivo" en la coreografía, según anticipó Dafne Cornez, la directora artística. Uno de los elementos que atrapa es el anuncio de una gran bola con mil fotogramas que se moverá por distintos puntos del campo durante la mayor parte de la ceremonia.

Luego llegará el turno de la música, con Jenniffer López, Pitbull y Olodum, a cargo de "We are one", la canción oficial del Mundial de Brasil. Trascartón Brasil saldrá a la cancha a dar el primer paso en busca del hexacampeonato ante Croacia.

Partido Inaugural

Brasil y Croacia se enfrentarán a partir de las 17, con televisación de la TV Pública.