La mandataria inauguró el estadio Nacional de Brasilia, una de las sedes del próximo Mundial 2014 y escenario de apertura de la Copa de las Confederaciones, el 15 de junio próximo.

La mandataria dio un puntapié a una pelota en el círculo central del campo, en compañía del gobernador del Distrito Federal de Brasilia, Agnelo Queiroz, y tres niños. Después se fotografió con un grupo de obreros que trabajó en la construcción del estadio.

El primer partido en el nuevo escenario de la capital se jugará hoy y será la final del campeonato regional entre Brasilia y Brasiliense.

El estadio, que demandó una inversión de 500 millones de dólares, llevará como nombre oficial "Nacional Mané Garrincha", en homenaje al ex delantero campeón mundial en 1958 y 1962.