Un adolescente de 16 años murió y otros seis jóvenes resultaron heridos, tres de ellos de gravedad, tras ser atropellados en la localidad bonaerense de Haedo por un automovilista que quedó detenido, mientras se investiga si corría una "picada".. El fallecido se trata de Lautaro Juárez (16), en tanto que el acusado, identificado por la Policía como Diego Nicolás Cuevas (19), fue formalmente imputado del delito de "homicidio simple con dolo eventual" y "lesiones" por el juez de Garantías 4 de Morón, Alfredo Meade, y a pedido del fiscal Alejandro Jons, que mañana le tomará declaración indagatoria.

Ocurrió el domingo de magrugada en avenida Rivadavia, a la altura de la calle Maipú, de Haedo, a unas diez cuadras de donde Estefanía Domínguez (21) murió embestida en la Navidad de 2004 por el auto conducido por Cristian Aldao, condenado luego por ese caso. Todo comenzó alrededor de las 7, cuando un Nissan Tiida color champagne circulaba por Rivadavia cuando se salió de la avenida y atropelló a un grupo de siete amigos, seis hombres y una mujer, que caminaba por la vereda de la mano contraria, junto al paredón que separa las vías del ferrocarril Sarmiento.

A raíz del impacto,Juárez cayó muerto en el lugar, al tiempo que los otros jóvenes resultaron heridos y quedaron tirados en el suelo, entre la vereda y la avenida, dijeron los informantes. Mientras que el Nissan pegó contra el paredón y salió despedido hacia la calle, donde terminó atravesado de contramano, sin el paragolpes delantero que quedó tirado sobre el asfalto, y con daños en su costado izquierdo.
 
El comisario Walter Iguiñez, titular de la Jefatura Departamental Morón, dijo esta mañana a la prensa que cuando los efectivos del Comando de Prevención Comunitaria (COC) arribaron al lugar del hecho hallaron a Juárez fallecido y a las demás víctimas heridas. Respecto de los heridos asistidos en Haedo, el informe de la cartera provincial indicó que "tres de ellos fueron atendidos por traumatismo de cráneo y de tórax y se encuentran graves" y el restante "padece contusiones diversas y está en observación". Y se agregó que los otos dos jóvenes atendidos en el Hospital Municipal de Morón presentan "lesiones moderadas" y "están fuera de peligro".

Por Continental, Mónica Robles, madrina de Lautaro, que resultó ileso con otro menor, relató que "Por suerte mi sobrino y su primo no sufrieron ni un rasguño, pero otro primo quedó muy grave y una prima está con quebraduras. Ellos no vieron nada porque estaban de espaldas a los coches, esperando el colectivo. El hombre del Bora le decía al del Nissan que huyera, pero él quiso quedarse y hacerse cargo. En la calle esa siempre hacen picadas, la otra vez quedó una chica muy mal. Es tierra de nadie la Gaona, desde siempre, tanto para las picadas de motos como las de autos", enfatizó en La Mirada Despierta.