El gobierno anunció que se modificará en un 20 por ciento el piso de Ganancias, decisión que no tardó en repercutir en diferentes sectores de la sociedad, con variadas opiniones.

“Es positivo”, opinó el secretario general de la CTA oficialista, Hugo Yasky, quien consideró la medida como un camino “para discutir un año difícil” en materia de salarios.

“Creemos que este impuesto debería modificar las alícuotas e incorporar a los jueces y operadores de transacciones financieras. Haría que el impuesto sea más justo”, subrayó.

“Mi prioridad es el 34,5 por ciento de los trabajadores no registrados”, enfatizó Yasky.

“Esto nos permite neutralizar, es un paliativo”, de cara a las paritarias venideras. El gremialista consideró que “es insuficiente” en cuanto que el impuesto debería “ser más progresivo”.

Para negociar nuevos salarios, “pusimos como número promedio el 25 por ciento”, enfatizó Yasky.