Jorge Telerman se lanzó la semana pasada para volver a ocupar el cargo de jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires. “Al principio me pareció prudente tener un tiempo de perfil más bajo, no para alejarme de mi vocación sino para ser más crítico”, advirtió.

“Fue una transición corta la que me tocó gobernar, sólo un año y medio”, recordó el vicejefe del gobierno porteño de Aníbal Ibarra, que se hizo cargo del Ejecutivo comunal cuando éste último fue destituido por el incendio en el boliche República de Cromañon que dejó 194 víctimas.

“Reflexioné sobre cómo mejorar y hacer las cosas de otra manera. Me parece que la ciudad sigue adoleciendo de los mismos problemas que hace tres años y medio. Uno siente que hay cosas que se agravaron”, dijo.

Asimismo, remarcó, “de cara al año electoral falta en la ciudad un espacio político cuya mayor preocupación sea la problemática urbana”.

“Últimamente, las discusiones son más sobre la tensión ciudad-nación y no cómo abordar y discutir los inconvenientes de Buenos Aires”.

“Estoy convencido que el mecanismo de elecciones internas hubiese permitido una elección clara y transparente de los candidatos pero lamentablemente las autoridades no avanzaron en ello”, dijo el peronista.