Dirigentes de la izquierda radical salieron a criticar los acuerdos electorales de última hora en el cierre de presentación de las listas para las primarias de agosto y las elecciones legislativas de agosto.

El espacio no peronista en la provincia de Buenos Aires cerró ayer sus alianzas conteniendo en un “Frente Progresista, Cívico y Social” a la Unión Cívica Radical, el Frente Amplio y la Coalición Cívica, con Proyecto Sur y el Partido Socialista Auténtico finalmente fuera de la entente. Aunque las candidaturas deberán presentarse el 22 de junio, los partidos definieron que la lista se resolverá por consenso y que los primeros lugares serán para Margarita Stolbizer (GEN-FAP) y Ricardo Alfonsín (UCR), en ese orden.

En este contexto, el sector de Nuevos Aires, que lideran Leopoldo Moreau y Federico Storani, analiza competir en las PASO del 11 de agosto con una lista propia. Por Continental, Storani denunció que “el oficialismo partidario, encarnado en la corriente que lidera (Ricardo) Alfonsín, ha reiterado prácticas que ponen en riesgo no sólo el éxito de este espacio progresista, sino incluso su propia existencia”.

En La Mañana, subrayó que su espacio buscó “la conformación de un espacio progresista, socialdemócrata”, pero, en las negociaciones con las demás fuerzas, “se han ido poniendo cada vez más obstáculos, llegando casi a la proscripción” de hecho “sólo para asegurarles la reelección a dirigentes que, la verdad, no han tenido actuaciones descollantes” durante sus mandatos.

Sobre el matiz proscriptivo de eventuales internas, criticó la eliminación del sistema D’Hont (proporcional) y su reemplazo por una relación de “dos legisladores para la mayoría y uno para la minoría, con un piso del 25 por ciento”. En este sentido, amenazó con “todas las impugnaciones que sean necesarias”.