El presidente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, Martín Sabbatella, dijo en la puerta de la sede de la calle Piedras del Grupo Clarín que se hizo presente en el lugar "con la escribana para notificar el inicio de la transferencia de oficio".

"La ley de Medios está plenamente vigente", agregó antes de entrar al edificio, donde mantenía a media mañana una reunión con los abogados de Clarín.

El alto funcionario explicó que la "transferencia de oficio tiene cien días hábiles y se inicia con su notificación para quien no haya presentado su plan voluntario de adecuación. Eso tiene un primer capítulo que es la tasación de las licencias y los bienes afectados al uso de las mismas".

"Un segundo capítulo que es la selección de las licencias a concursar, un tercero que es el concurso de las mismas, y por último la adjudicación y el traspaso de la licencia al nuevo titular al final del proceso", detalló Sabbatella en las últimas horas.

Hasta que el proceso de transferencia concluya, añadió, el actual titular de las licencias "deberá hacerse cargo del servicio, cuidarlo, mantener las fuentes de trabajo y proteger los bienes. Y esto es lo que le pedirá el Estado que haga hasta que llegue el nuevo titular" al Grupo Clarín, el único grupo de medios que no presentó su plan de adecuación voluntario.

"La diferencia entre el plan de adecuación voluntaria y el proceso de oficio es que en el primer caso el que lo organiza es el propio grupo empresario, y en el proceso de oficio lo hace el Estado al no haber un cumplimiento de la norma", agregó el referente de Nuevo Encuentro sobre el proceso de aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. Además, explicó que, en el caso de la adecuación de oficio, se obligará a la empresa a desprenderse de "los medios menos importantes en términos económicos" y no se incluirán "los medios más simbólicos" del grupo.

El funcionario sostuvo que "durante estos tres años hubo una ley de la democracia, votada por el Congreso, suspendida por medidas cautelares. Y eso nos parecía una barbaridad y lo dijimos".

"Una ley de la democracia no puede ser suspendida por una medida cautelar cuando no hay riesgo inminente ni riesgo para la libertad de expresión, tal como lo dijo la Corte Suprema", subrayó.