Mientras en la Argentina la superficie sembrada de trigo perdió 2,3 millones de hectáreas en los últimos diez años, en Uruguay, según fuentes de ambos países, los argentinos no han parado de sembrar trigo. Allí no hay retenciones ni restricciones para poder exportar .


Así, de las 450.000 hectáreas de la campaña 2012/2013 y las 475.000 hectáreas de la última campaña, se estima que unas 200.000 fueron sembradas o gerenciadas por agricultores argentinos, que también cultivan soja, lo que representa al menos el 40% del cereal que se siembra en Uruguay, publica el diario La Nación.


El cepo que la administración de Cristina Kirchner impuso sobre el trigo , interviniendo el mercado para reducir la competencia entre molinos y exportadores y cuotificando las ventas al exterior, no hizo otra cosa que acelerar el interés de los argentinos por cruzar el charco, coincidieron en afirmar especialistas consultados por el matutino.


"Los argentinos en el país deben representar cerca de 50 por ciento"


"La llegada de argentinos a Uruguay empezó con el corralito y la devaluación (en 2002)", recordó Eduardo Blasina, consultor en temas agropecuarios y agregó: "Hacen trigo porque es lo que saben hacer, tienen el know how , y han aprendido las diferencias agronómicas de Uruguay, que son importantes (pendientes, suelos diversos, disponibilidad de agua muy variable). Entienden que en la formación del precio el gobierno no interviene. Creo que eso da una tranquilidad que no hay del otro lado del río (por la Argentina)".