El presidente de Bolivia, Evo Morales, dialogó en exclusiva por Continental con Víctor Hugo sobre la situación que le tocó vivir en el avión presidencial al volver de una gira por Europa del Este.  Ante la sospecha del que el "topo" Snowden, que filtró datos secretos de Estados Unidos, pudiera estar en la aeronave, las autoridades austríacas tuvieron secuestrado al mandatario altiplánico durante medio día.

“Sé qué desde anteayer el pueblo latinoamericano estaba movilizado, con pronunciamientos y movilizaciones de rechazo” a la decisión europea de “no respetar los convenios internacionales. Me sorprendió la cantidad de gente que me recibió en el aeropuerto de El Alto y les agradezco a la gente y a los funcionarios que se pronunciaron contra esta actitud propia de imperios”, destacó en La Mañana.

“Yo no puedo entender cómo Europa antes se consideraba gran defensora de la democracia y los derechos humanos”, y “ahora son los primeros sometidos a las instrucciones del Gobierno de los Estados Unidos, que mediante el presidente quieren dañar la imagen del continente e intimidarnos. Mi pecado y mi delito es ser indígena, antiimperialista y cohesionar todas las políticas que nos traen desigualdades en la América latina y el Caribe. No van a poder acallar al continente”, advirtió.

Sobre los países, como Francia, Austria y otros, que se negaron a darle paso al avión presidencial boliviano, señaló que entre ellos hay varios “que tienen inversionistas (en Latinoamérica), que se consideran socialistas y que tienen una gran deuda con nuestros países y (sin embargo) son los más serviles con Estados Unidos”, concluyó Morales. 

El mandatario boliviano dijo ademàs que “no van a poder amedrentarnos” y consideró que el incidente “es una abierta provocación al continente. Usaron a su agente, el imperialismo norteamericano, para amedrentarnos” pero “nunca nos van a amedrentar, nunca nos van a asustar porque somos un pueblo que tenemos dignidad y soberanía”, enfatizó.