De acuerdo a la ley que impuso el macrismo hace dos años, la cuota de la factura de Alumbrado Barrido y Limpieza (ABL) recibirá ajustes automáticos cada año en base a la valuación fiscal, con el propósito de que esa cifra que representa la base imponible llegue al 80% del valor de mercado.

Frente al acelerado encarecimiento del costo de vida, y en medio de la campaña electoral por las legislativas de octubre, el oficialismo porteño intentará debatir sobre tablas una iniciativa propia que busca amortiguar la suba que sufriría el año próximo el ABL.

Ayer, el jefe de la Legislatura, Cristian Ritondo (PRO) propuso que el proyecto de ley –presentado como una baja al impuesto en 2014- sea directamente tratado esta tarde en el recinto, sin necesidad de obtener un despacho de comisión, publica el diario Ámbito Financiero.

El proyecto, de un artículo, propone que se fije "transitoriamente para el ejercicio fiscal 2014 un tope de aumento respecto de lo determinado en el período fiscal anterior, para los tributos que recaen sobre los inmuebles radicados en la Ciudad de Buenos Aires".

Además, determina mediante una tabla los máximos permitidos del incremento para la Valuación Fiscal Homogénea (VFH): de hasta 150 mil, el freno es del 20% con un coeficiente aplicable de 1,20; para las VFH de 150001 a 300 mil, de 30% con 1,30 el coeficiente y las VHF mayores a 300 mil el aumento no podrá superar el 40% con un coeficiente aplicable de 1,40, precisa el matutino.

"Se considera prudente disminuir coyunturalmente el ritmo de aplicación plena de los efectos de la Ley 4040 (que estableció el sistema de actualizaciones) para acompañar el esfuerzo de los vecinos que cumplen con sus obligaciones, sin distorsionar el trabajo técnico sobre las valuaciones", se fundamenta en la iniciativa que, de aprobarse, será un beneficio para los contribuyentes pero impactará negativamente en las cuentas de la administración de Mauricio Macri.