En una sesión que terminó en el habitual escándalo opositor cuando no tiene los números para bloquear una decisión legislativa, el oficialismo logró imponer ayer miércoles la controvertida designación de dos representantes de la Cámara baja en la Auditoría General de la Nación (AGN).

Son los dirigentes de La Cámpora Julián Álvarez y Juan Forlón, que hasta ayer se desempeñaban como viceministro de Justicia y presidente del Banco Nación, respectivamente. Juraron como representantes del bloque mayoritario en la Cámara de Diputados y tienen mandato hasta 2023. El oficialismo tiene un antecedente a favor para realizar los nombramientos antes del recambio legislativo de diciembre: con el acuerdo de la UCR, en noviembre de 2007 Diputados avanzó con las designaciones también antes del 10 de diciembre.

El mandato de los auditores Oscar Lamberto y Vicente Brusca y el del radical Horacio Pernasetti vencían ayer, aunque la oposición afirma que el recambio debía realizarse recién el 15 de diciembre. Sin embargo, en esa fecha el kirchnerismo seguirá siendo la primera minoría en Diputados, con lo que la disputa se diluye en abstractos alegatos políticos en el marco de la campaña hacia el ballotage. Por Continental, el diputado radical Ricardo Buryaile consideró que "El Frente para la Victoria se manoteó dos auditores ilegalmente para tener el control de un organismo".